La consideración social del artista ha ido evolucionando con el paso de los años, en la Antigüedad y en la Edad Media era una actividad artesanal, pero no es hasta el Renacimiento (s. XV – XVIII) que realmente no se consolida la figura de artista.
La estética y la función de las obras de arte también han ido evolucionando. Primeramente, había una oposición entre las dos, seguidamente fue de compaginación y finalmente fue de identificación.
Los cambios técnicos, los avances históricos y las innovaciones en las formas artísticas también tienen una relación directa. Un cambio técnico supone un avance histórico y una innovación en la forma artística y/o en la relación del artista con la sociedad.
Durante el paleolítico el arte tenía un carácter mágico-religioso y buscaban que de esta manera se pudiera atraer la caza.
En el neolítico, en la época de la Revolución agrícola se produce un cambio en el pensamiento, se busca un pensamiento más complejo y los artesanos pasan a ser artistas que trabajan para los nobles, de esta manera aparecen nuevos artes, conocidos como artes menores.
Durante la Antigüedad, en Grecia a causa del desarrollo comercial se produce una cultura antropocéntrica que deriva en un aumento en el valor social y prestigio del artista y también en que el concepto de belleza empiece a captar protagonismo. En cambio, en Roma el arte adquiere una función de propaganda política, aunque también se tienen en cuenta ideales estéticos.
En la Edad Media el arte empieza a adoptar una nueva función, una función religiosa – didáctica y el artista ya es considerado como una persona que realiza un oficio.
Hasta el Renacimiento todos los artistas eran anónimos, pero a partir de esta etapa comienzan a ser conocidos y por lo tanto aumenta su prestigio.
Durante el siglo XVI hasta 1789 se produjeron dos factores claves: la crisis religiosa y la consolidación del estado moderno, por estos motivos el arte tuvo que cumplir una función propagandística y religiosa, por lo tanto, sus clientes eran el clero y la nobleza.
A finales del siglo XVII y durante el siglo XIX se produjo el triunfo de las revoluciones burguesas y esto provocó una independencia del artista al frente de la Iglesia y del Estado.
Una de las funciones principales del arte había sido la representación de la realidad, pero a partir del mundo contemporáneo, la fotografía y el cine realizan mejor esta función y por lo tanto el arte tiene que buscar un nuevo camino, tratan de expresarse e impresionar, ya que tienen más libertad tanto en las formas como en el contenido.
Las leyes del mercado del arte se empiezan a imponer por el gusto y provoca que haya un divorcio entre el artista y la sociedad. El artista delante de esta dificultad busca ser provocativo y escandalizar al público.
En conclusión, las funciones del arte están en continuo cambio a causa del momento y el contexto en el que nos situamos, además en el arte intervienen dos partes con la misma importancia prácticamente, el artista y el público.
Personalmente creo que es obvio que el arte esté en continuo cambio, el arte podría ser equivalente a factores como la economía, la política… Cualquier de estos elementos requiere una adaptación al momento en el que se encuentra y al contexto que le envuelve, por lo tanto el arte también lo necesita. El arte perdería mucho valor si siempre hubiera tenido la misma función, las mismas formas, el mismo mensaje… Todas y cada una de las características del arte tiene su momento en el tiempo.
D.Ruiz 